Con el registro de su información, las pymes pueden mejorar el control de su operación y tomar decisiones que aumenten la rentabilidad, explica la economista María Dolores Ortega Paredes.
Todos los negocios llevan un registro de sus ventas, pero ¿cuántos documentan si fue en efectivo, a crédito o en plazos? En cualquier tienda, el encargado sabe qué días de la semana acude más clientela, pero ¿cuántos saben cuándo y por qué los costos de operación suben y se reduce el margen de ganancia?
En la sociedad de la información, los datos son un factor de competitividad. Por eso, las pymes que no estén llevando registros diarios deben comenzar a hacerlo en el 2019, explica la economista María Dolores Ortega Paredes.
“Sin los datos, no es posible identificar, clasificar, utilizar y aprovechar la información que permita al negocio enderezar, corregir, decidir, añadir, armar sus estrategias para el corto, mediano y largo plazo”, refiere la ex colaboradora de Reforma.
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La importancia de los datos es que deriva en información para la toma de decisiones. “Los datos me atrevo a decir que se han convertido en un insumo de gran peso en el desempeño de los negocios, de todos los giros. Son un aliado de la productividad y de la competitividad de las empresas, sin importar su tamaño”.
“Hagamos números”
Como ejemplo, Ortega Paredes recuerda cuando la dueña de un restaurante le consultó qué tan conveniente era cerrar el restaurante los lunes durante el verano, debido a que mientras la clientela bajaba, los recibos de luz eran excesivos por el uso de los climas.
“Mi respuesta fue: hagamos números. Lo primero es ver los registros de afluencia de clientes en los veranos pasados, y compararlos con el resto de las temporadas. El segundo paso era revisar el costo de los recibos de energía eléctrica, estimar los ahorros por un menor consumo, para finalmente comparar ingresos contra costos y de esa manera decidir”.
Las pymes necesitan big data
Los dueños de pequeños negocios pueden pensar que el big data es solo para las grandes compañías. Lo cierto es que toda empresa, por pequeña que sea, puede registrar y controlar sus datos.
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“Un paso a la vez. Primero, es conseguir el hábito del registro de datos de toda la operación del negocio. Concentrar esos datos de manera ordenada, para posteriormente utilizarla en el análisis y generar información relevante”, abunda la especialista y columnista de negocios.
La información que no debe faltar
Entre los datos cruciales que vale la pena registrar, Ortega Paredes menciona las áreas geográficas de mayor demanda del producto y sobre qué productos en particular, las fechas de mayor consumo y el perfil de los clientes.
En materia de costos, la especialista aconseja saber los insumos con mayor incidencia en el negocio, la evolución de los costos y consumos de los insumos por fechas o temporadas, así como identificar a los proveedores más competitivos.